El pasado Jueves 18 de Mayo, según lo programado en la web, nos reunimos junto al polideportivo de Membrillera, las personas interesadas en realizar la visita al colmenar que la Fundación Amigos de las Abejas tiene en Membrillera (Guadalajara).
Por parte de la Fundación Amigos de las Abejas acudimos Jesús Llorente, Luis Pérez y Amparo Sánchez miembros y voluntarios de la misma, por la otra unas doce personas que venían a aprender y conocer el mundo de las abejas.
El tiempo previsto el día anterior por la AEMET era 19º , Sol y viento de 30 K/h , con este viento abríamos suspendido normalmente la visita pero ya estaba todo el proceso en marcha y decidimos continuar.
Sobre las 11:00, ya estábamos todos reunidos y partimos por una carretera que comunica con San Andres del Congosto, recorriendo unos 2Km para después tomar un camino agrícola que nos lleva al rio Bornoba donde dejamos nuestros coches bajo la sombra de una chopera, al frescor del rio que bajaba muy caudaloso para esta época del año debido a estar abierto el pantano de Alcorlo para dar agua a los terrenos agrícolas, anduvimos por una pequeña senda unos 200 metros que nos separaban del colmenar.
Sorprendentemente al resguardo de las montañas en este paraje no hacia viento y la temperatura era agradable de unos 20º.
Allí a escasos metros de las colmenas dimos la primera lección sobre las abejas, explicamos su importancia para la polinización de las plantas, sus componentes, las obreras, la reina, los zánganos, que misión tiene cada uno en la colmena, que es la apicultura, los principales productos que se obtienen, miel, el polen, la jalea real, cera, propóleos, veneno también llamado apitoxina.
Después, con una colmena sin abejas mostramos como es su hogar, cuadros con cera en diferentes estados de construcción, comentamos los problemas que tienen actualmente las abejas y que podemos hacer para facilitar que sigan con nosotros, respondiendo a continuación a todas las preguntas de nuestros visitantes muy interesados en la vida de las abejas, su reproducción, las amenazas que se ciernen sobre ellas y sobre la apicultura .
Para realizar la visita realmente a las colmenas con abejas nos ponemos los trajes, revisando uno a uno a todos nuestros visitantes para comprobar si están correctamente y no dejar ningún resquicio donde puedan ser picados, mientras preparábamos el ahumador por si lo necesitamos y empezamos a mostrar cómo es realmente el mundo de las abejas.
En estos casos es fundamental no hacer movimientos bruscos, ruidos ni golpes, trabajamos como si lo hiciéramos en cámara lenta para no desatar la alarma entre nuestras abejas, fuimos abriendo colmenas y viendo su organización, panales con miel, polen, cria cerrada, huevos, larvas, miles de abejas que se afanaban en trabajar, zánganos, las reinas con tantísimas abejas muy difícil localizarlas.
Las abejas al principio no se mostraron agresivas, el humo solo fue necesario para no aplastarlas entre los marcos y tapas, con el paso del tiempo fueron poniéndose más nerviosas y diciéndonos que las dejáramos en paz, cosa que hicimos después de estar cerca de una hora entre ellas, dando por terminada la visita.
Finalizamos el acto obsequiando a nuestros visitantes con un tarrito de miel de nuestros colmenares de polinización, agradeciéndoles su visita y con la esperanza de que les sirva para comprender la importancia que tienen y difundan entre amigos y familiares sus conocimientos porque solo entre todos podemos hacer que continúen con nosotros.